El conjunto vigués ha vuelto a ganar (1-3) en el primer partido de Liga después de seis años. Los pupilos de Paco Herrera tuvieron enfrente a un Real Murcia que le creó muchos problemas en la primera mitad. El potencial ofensivo céltico fue clave para traer los tres primeros puntos del campeonato a Vigo. La actuación de Quique de Lucas, memorable.
No fue una buena primera mitad. La intensidad del Real Murcia maniató la sala de máquinas céltica. El dominio pimentonero se fue diluyendo con el paso de los minutos. En ese espacio de tiempo, dos intervenciones de Yoel evitaron el tanto de los grana. A partir del cuarto de hora, el Celta ya iba combinando y llevando el peligro al área local. A la media hora de encuentro llegaría la jugada del partido. Un pase en profundidad de Bermejo encontraba a David Rodríguez. El delantero talaverano bajaba el esférico con el pecho y remataba de volea a la red. Golazo para los visitantes.
La alegría duraría sólo un minuto. Kike, sustituto del lesionado Chando, anotaba el tanto del empate al aprovechar un centro de Pedro –el extremo fue una pesadilla para Hugo Mallo-. El gol reanimó al Real Murcia, que encerró al Celta en su área durante unos minutos. Tras el acoso local, el conjunto vigués volvió a combinar sin problemas. Al filo del descanso, Prieto Iglesias señaló penalti por mano clara de Iván Amaya. De Lucas transformaba, a la perfección, la pena máxima. El Celta se iba al descanso venciendo por la mínima y jugando a medio gas.
En la segunda parte el Real Murcia bajó considerablemente su nivel. El físico de ambos conjuntos se resentía. Quizás por el calor y por ser el primer partido del campeonato. El Celta no tenía prisa. El resultado y el tiempo corrían a su favor. Mediado el segundo período volvió a aparecer De Lucas. El catalán acercaba los tres puntos a Vigo al transformar una falta en la que, en principio, no había ángulo. El tanto del exjugador grana silenció a la Nueva Condomina y dejaba al Real Murcia contra las cuerdas. El conjunto vigués no mató el partido. Herrera aprovechó para dar descanso a David, De Lucas y Bermejo.
Esa falta de ambición quizás sea uno de los “peros” del Celta. Con Toni y Abalo como referencias, los de Paco Herrera ya no crearon más peligro en el área local. El equipo pimentonero tampoco llegaba con claridad a la meta defendida por Yoel. El único camino empleado por los de Iñaki Alonso eran las jugadas de estrategia. Pero, en esta ocasión, el conjunto vigués supo defender estas acciones y acabó llevándose a Vigo los primeros tres puntos del curso 2011/12.
Ficha técnica:
Real Murcia: Alberto; Molinero, Iván Amaya, Oriol, Óscar Sánchez; Richi (Cerrajería, min. 57), Aguilera, Paco Sutil (Isaac, min. 28), Pedro (Niko, min. 67); Emilio Sánchez y Kike.
Celta de Vigo: Yoel; Hugo Mallo, Vila, Catalá, Bellvís; Natxo Insa, Bustos, Álex López, De Lucas (Dani Abalo, min. 78); David Rodríguez (Toni, min. 68) y Mario Bermejo (Oubiña, min. 82).
Goles: 0-1, David Rodríguez (min.30); 1-1, Kike (min.31); 1-2, De Lucas, de penalti (min.45); 1-3, De Lucas (min. 65).
Árbitro: Eduardo Prieto Iglesias (comité navarro). Amonestó a Óscar Sánchez, Iván Amaya y Cerrajería por el Real Murcia y a Bellvís, Toni y Oubiña por parte del Celta de Vigo.
